Solo autobiográfico de danza contemporánea con elementos audiovisuales y teatrales que se centra en la historia personal del bailarín Gonzalo Decuadro y el testimonio sobre su experiencia cercana a la espiritualidad y religión en la que fue criado. Se plantea el particular vínculo con su madre, líder de una iglesia y predicadora de la palabra de Dios, quien adoctrina al intérprete desde su infancia bajo creencias y experiencias religiosas.
La obra pone sobre la mesa la relación entre religión y arte, el vínculo entre una madre y su hijo, y la relación de una persona que atraviesa un momento “apocalíptico” de su vida en relación al contexto contemporáneo.